Causó curiosidad que luego de la denominada “Reunión de Bandidos” como fue calificada en la tendencia de Twtter, el encuentro entre los líderes de las Farc con el senador Iván Cepeda, el exministro Juan Fernando Cristo y el expresidente Juan Manuel Santos, se convocara a un paro nacional por parte de toda la izquierda del país. La coincidencia, no se cree fortuita y se ha interpretado como una de las acciones resultantes de la reunión que intentó ser clandestina pero que salió a la luz por la denuncia de los vecinos a un periodista.
La convocatoria de este paro nacional se plantea como rechazo al Gobierno de Iván Duque. Al la convocatoria de Paro, se han unido los movimientos de izquierda estudiantil, congresistas de la bancada de oposición, las centrales obreras como la CUT, la CGT, la CTC, Fecode, el PC3, la Juco, las centrales de pensionados CDP, CPC y ong´s de izquierda.
Todo ha sido organizado para que el próximo lunes7 de septiembre se produzca el paro que incluirá desde las 10:00 de la mañana una caravanas, para evitar las marchas que puedan contagiar de Covid-19 a los manifestantes, con la orden de bloquear las ciudades y ralentizar el tráfico para paralizar el desarrollo de la nueva normalidad.
El paro va mas allá de frenar una jornada, y se tiene como orden clara, el boicotear el desarrollo de los programas del gobierno en materia de empleo, lo que ha llevado a que las centrales obreras, se retiren del pacto denominado Misión de Empleo, que es la mesa para pensar y reactivar la economía desde el sector trabajador, que creó el Gobierno y al que habían suscrito las Centrales de trabajadores.
Para los próximos días, se prevé que varias empresas del país, que están en negociación de sus pliegos de peticiones, sean votados para huelga y se sumen a la votada ya en el Cerrejón
El decreto 1174 que recientemente expidió el Gobierno, ha sito tomado por las centrales obreras como una reforma laboral simulada y quieren manifestarse en su rechazo en esta jornada. Denuncian que con este decreto se desmejoran las condiciones laborales, pues se reduce el número de horas semanales lo que para las centrales obreras, es bajar el ritmo a la cotización para pensión que hará que se demore mas llegar al tiempo mínimo necesario.
Si bien la convocatoria al paro nacional, ha sido declarado como prohibido por los Gobiernos nacional y locales, al estar enmarcados dentro de los decretos de Aislamiento Selectivo. La nueva normalidad dada en gran parte del país, no permite las aglomeraciones y por esta razón, las autoridades locales, no ven con buenos ojos esta convocatoria, al temer un rebrote del virus.
No obstante los convocantes, afirman que cumplirán con los protocolos de distanciamiento y que por esta razón también, el paro se realizará en caravanas de vehículos, emulando, curiosamente, lo que ha hecho el uribismo en las últimas semanas.
